El seguro para comercios es un producto ya muy estandarizado. Cubre los daños por incendio, robo, daños por agua, cristales, responsabilidad civil y un largo etc.
Ahora bien, el hecho de que está estandarizado, no implica que las compañías no añadan coberturas que según las circunstancias de los clientes pueden ser interesantes, por lo que aunque no es muy entretenido conviene dedicar un tiempo a estudiar las coberturas y exclusiones de las pólizas que nos ofrecen.
Mención especial merecen los seguros de comercio ofrecidos por los bancos. Por un lado tener en cuenta que el profesional de la banca no es necesariamente un especialista en seguros y que además su principal interés es cubrir el valor de la hipoteca, como garantía, sin tener en cuenta todo el resto de nuestras necesidades. Por ello nos podemos encontrar con precios muy bajos, pero con coberturas muy limitadas, de forma que la mayoría de los accidentes que podríamos tener cubiertos, no los tengamos.