El outsourcing informático es una modalidad laboral que se ha impuesto en los últimos años. Las empresas trabajan por proyectos y no desean cargar con grandes plantillas o bien prefieren delegar funcionalidades no esenciales en personal externo.
La empresa de outsourcing tiene dos grandes responsabilidades, por un lado seleccionar adecuadamente al profesional que necesita su cliente y por otro que este realice adecuadamente su trabajo.
Por mucho cuidado que se tenga, no siempre se acierta y el profesional puede llegar a causar importantes perjuicios al cliente, de ahí la conveniencia de contar con un buen seguro de responsabilidad civil que se haga cargo de los gastos de defensa y eventualmente de la indemnización que se pacte o se determine judicialmente.
